El libro de la sabiduría. Simab dijo: “Venderé el libro de la sabiduría por cien piezas de oro, y algunos dirán que es barato.” Yunus Marmar le dijo: “Y yo regalaré la llave para comprenderlo, y casi nadie la tomará, incluso aunque sea gratis.

Virtualmente todas las organizaciones que conoces funcionan esencialmente gracias a tu codicia. Te atraen porque lo que dicen o hacen le resulta atractivo a tu codicia. Este factor está oculto debido a su mera apariencia. Si dejas de escuchar sus palabras y contemplas el efecto, pronto verás que es así.

De acuerdo con los sufis, existe una sucesión de experiencias, que en conjunto constituyen la maduración educativa y evolutiva del estudiante. La gente que piensa que cada logro es la meta misma se congelará en cualquiera de tales etapas, y no podrá aprender por medio de lecciones sucesivas y sustitutivas.

Definición de un SufiPara aprender, la gente debe abandonar mucho, y esto incluye el ritual como algo de lo cual imaginan que pueden aprender. Es para recalcar esto que Abu-Yaqub al-Susi, citado en Taarruf, de Kalabadhi, declara que el Sufi es “alguien que no se preocupa cuando le quitan algo, pero que no cesa de buscar lo que no tiene.

No es una casualidad que los Sufis piensen que pueden conectarse de forma más constructiva con personas que están bien integradas en el mundo, además de tener objetivos superiores, y que aquellas que adoptan una actitud razonable hacia la vida y la sociedad tal como la conocemos pueden por lo general absorber muy bien las enseñanzas Sufis

Junaid de Bagdad pasaba por la escena de un ahorcamiento público, donde un ladrón se encontraba en el patíbulo. Junaid se inclinó en dirección al criminal. Alguien le preguntó: “¿Por qué hiciste eso?” Junaid dijo: “Me estaba inclinando ante la claridad de sus intenciones. Por su objetivo, ese hombre ha dado su vida.

Una barba mejor que la tuya. “Todos los verdaderos devotos llevan barba,” dijo el Imán a su audiencia. “Muéstrenme una barba espesa y brillante, y yo les mostraré a un verdadero creyente!” “Mi cabra tiene una barba mucho más tupida y larga que la tuya,” contestó Nasrudín. “¿Eso significa que es mejor musulmán que tú?”.

El camino Sufi es a través del conocimiento y la práctica, no a través del intelecto y el habla. Como dice el príncipe Dara Shikoh en el poema persa: ¿Deseas ser incluido con los Señores de la Visión? Pasa (entonces) del discurso a la experiencia. Al decir “Unidad”, no te transformas en un monoteísta; La boca no se vuelve dulce por la palabra “Azúcar”.

Consejos de BahaudínTú quieres ser llenado. Pero algo que está lleno primero tiene que ser vaciado. Vacíate para que puedas llenarte adecuadamente con el cumplimiento de estos consejos, que puedes realizar como deberes hacia ti mismo.Primero:Nunca sigas ningún impulso para enseñar, sin importar lo fuerte que pudiera ser. El mandato para enseñar no se siente como un impulso.Pensadores de Oriente.

Eruditos de Oriente y Occidente consagraron heroicamente sus existencias profesionales a poner a disposición del público el material literario y filosófico sufi, utilizando para ello sus propias disciplinas. En muchos casos hicieron referencia a la insistencia de los propios sufis en que el camino de los sufis no puede ser comprendido valiéndose del intelecto o mediante el común aprendizaje a través de libros.

El principal problema es que la mayoría de los comentaristas están acostumbrados a considerar a las escuelas espirituales como “sistemas”, más o menos similares, y que dependen del dogma y el ritual: en especial de la repetición y la aplicación de presiones continuas y uniformes sobre sus seguidores.El camino sufi, excepto en formas degeneradas que no deben clasificarse como súficas, difiere totalmente de eso.

Existe la afirmación Sufi de que la verdad no se descubre o mantiene por la mera repetición de enseñanzas. Su comprensión sólo puede mantenerse mediante la continua experiencia de ella. Y es en la experiencia de la verdad donde los Sufis siempre han depositado su confianza. Por tanto el sufismo no es “Haz como digo y no como hago”, o incluso “Haz como hago”, sino “Experiméntalo y conocerás”.

Alí, hijo del padre del buscadorAlí dijo: “Nadie puede llegar a la Verdad hasta que sea capaz de pensar que el sendero mismo pueda estar equivocado. Esto es así porque aquellos que sólo pueden creer que debe ser correcto no son creyentes, sino gente incapaz de pensar de un modo diferente del que ya piensan. Esta gente no son hombres, en modo alguno. Como animales, deben seguir ciertas creencias, y durante este período no pueden aprender. Y puesto que no pueden llamarse 'humanidad', tampoco pueden llegar a la Verdad.

Cuando oración, rituales y vida ascética son solo los medios para la autoindulgencia, son más dañinos que beneficiosos. Esto resulta muy obvio para la gente hoy en día, cuando es comúnmente reconocido que las fijaciones no son lo mismo que las actividades valiosas y laudables. Uno no debería rezar si esa oración es vanidad, los rituales son erróneos cuando proporcionan satisfacciones inferiores, como estímulo emocional, en vez de instrucción; él o ella no deberían ser ascéticos si no hacen más que disfrutar de ello.

En el mundo moderno nos encontramos con una situación paradójica: aunque en teoría el hombre sabe que puede extender su atención hacia algo y luego desligarla, no suele hacerlo. En muchas áreas de su actividad no es capaz de observar algo, luego desligarse de ello y observar otra cosa.Una vez que ha encontrado algo que le interesa, no puede desidentificarse de modo eficiente y, por lo tanto, no puede ser objetivo. Observa que en la mayoría de los lenguajes – por no decir todos – tenemos palabras como “objetividad”, lo cual conduce a las personas a imaginar que poseen esa característica, o que pueden usarla con facilidad. Esto equivale a decir: “Conozco la palabra oro, de manera que soy rico