El inglés necesita de un verbo fatalista para emplear la expresión "enamorarse": to fall. O sea que el enamorado no exactamente asciende a un estado superior, sino al contrario: cae. Tropieza, se distrae, es entrampado. Cae, igual que Luzbel. Si Cristo hubiese dicho "Enamoraos los unos a los otros", ya estaríamos todos viviendo en el Infierno.

Your Comment Comment Head Icon

Login